La historia del marketing ha venido marcada por numerosos cambios relativos a las distintas formas que se han ido adoptando para adquirir productos o servicios y que se extienden a toda la esfera internacional. Estos cambios, que lógicamente afectan a la sociedad puesto que forman parte intrínseca de ella, han supuesto grandes avances para todo aquello que se relaciona con las ventas en comercios.

Así pues, con la llegada de Internet y de las nuevas tecnologías, surgió una nueva modalidad de compra: las compras online, o sea, por Internet. Así, poco a poco la competencia entre empresas fue acentuándose, de modo que estas tenían ahora que buscar nuevas medidas para captar clientes potenciales. Ahora debían adaptarse a las condiciones de un mercado que desconocían casi en su totalidad y del que no se tenía referencia acerca de su funcionamiento.

Lo cierto es que Internet creció hasta límites inesperados y con él, las empresas empezaron a tomar partida en el asunto a través de estrategias de marketing online.  De esta forma, ya habría que distinguir entre marketing digital y aquel otro tipo de marketing existente hasta ahora.

Como consecuencia de la rapidez de Internet por avanzar e innovar, los comercios han tenido que instaurar estrategias de marketing cada vez más potentes, más agresivas. De la misma manera, la crisis económica ha hecho que las empresas se debatan en duelo para mantenerse a flote en el mercado, por lo que también la crisis ha sido decisiva para el marketing digital.

El 2014 se presenta como un año en el que la economía comienza a dar sus primeros síntomas de mejoría y muchos expertos prevén un año de crecimiento. En aras de querer hacerse notar, las empresas optan por un marketing digital sin precedentes. Su eficacia sera cuestión de tiempo.